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Arduos días tuvieron que pasar nuestros protagonistas para que el mundo no dejara de
existir. Pero esos ya son tiempos pasados, el mal fue derrotado, la alegría
regresó a la tierra, el cachondeo se impuso por doquier, la gente danzaba al
ritmo de la música mientras llevaban a cabo la más descomunal orgía que los cielos hayan visto... (colleja para
el fiera que esta escribiendo)... pues eso... que todos eran muy felices y comían
perdices. Y ahora os estaréis preguntando (momento de tensión)... ¿de quien
Co(Censura)ones esta hablando este tio? Pues bueno... la cosa seguiría así:
Por
1 millón de pesetas ¿De quien esta hablando este tio?
de los teletubbies (en versión Funky)
de los protagonistas del Final Fantasy VIII
de los pelillos del sobaco de Geyper-man
de esos capullos que dicen que lo que sale del Prestige
solo son unos “hilillos” (Nunca Mais)
Difícíl Eh? Pues bueno, para los
que no hayan respondido la B les recomiendo que vuelvan a cursar todos sus
estudios desde Tercero de Párvulos y al resto les encomiendo a que sigan mi
historia.
Pues lo dicho Squall y compañía se salieron al fin con la suya (especialmente Squall
que se llevo como premio la tia más buena de todo el planeta que le haría un
regalo de nueve meses... (colleja para el fiera que escribe... bis)... ejem...
la tia bue...esto...señorita Rinoa). Y una vez terminada su aventura cada uno
de ellos emprendió su camino por separado (Excepto a Squall y Rinoa que no los
separaban ni con agua caliente... viciosos XD). Pero les faltaba aún una cosa
por hacer y el destino movió, una vez más, sus eternos engranajes para que este
grupo de héroes volviera a unirse.
La historia empezó de nuevo una tarde de agosto en el Jardín de Balamb:
ZELL: ZZZZZZZZZZZZZZ...ZZZZZZZZZZZZZZ...ZZZZZZZZZZZZZ...
Nuestro ya conocido Zell, tan
dicharachero y jovial, imagen de la juventud emprendedora, valiente y... por
que no decirlo... estúpida e imprudente... Ah si, este es nuestro Zell. Como ya
habréis advertido Zell está inmerso en un profundo sueño (Como la mayoría de
las horas del día) pero su suerte está a punto de cambiar... una sombra se
mueve en su habitación y no trae buenas intenciones. De repente una figura
difusa apareció en la habitación con dos bocinas en cada una de sus manos. El
estrépito fue tal que los casquetes polares se resquebrajaron y la Sagrada
Familia cayo entera ( Que más os da? Si igualmente no la veréis nunca
acabada[En honor a las prisas del arquitecto jefe de la Sagrada Familia]). Como
os podéis imaginar Zell despertó mas bien rápido e inmediatamente encendió la
luz para ver quien era la culpable de tal herejía. Era ella!!! Selphie.
Selphie: Despierta
Zoquete!!!
Zell: Pero se puede saber que te
ocurre?
Selphie: Tenemos correo de parte
de Quistis. Leo... “Queridos amigos, os envío esta carta para pediros que por
favor os reunáis conmigo ya que
terribles acontecimientos me hacen requerir vuestra ayuda... firmado Quistis”
Selphie: Oyes Zell, Quistis pide nuestra ayuda
y como buenas personas no podemos rehusarla.
Zell: (Con mirada de
circunstancias)Falsa... a ti lo único que te motiva es que quizás Irvine
aparezca por ahí ya que desde que se fue hace tres meses nos has echado un solo
clavo...
Selphie: Cierra tu estúpida boca
o te voy vas a tragar una caja entera de supositorios talla Bahamut...
Zell: Si, si, tu dirás lo que
quieras pero si esta mañana estabas limpiando el traje de cuero por algo
seria... perversa.
La paciencia de Selphie se acabó.
Una hacha de cuarenta kilos surcó la
habitación. Debido a la brutalidad de la escena la acción pasa directamente a
la enfermería de Balamb Garden:
Dra Kadowaki: Selphie has de
templar tus nervios, con esta ya son 16 veces que le tenemos que extraer una
hacha de su malograda cabeza. Por si acaso le hemos injertado una cremallera
por si se te ocurre volver a abrirle la cabeza para facilitarnos así el
trabajo.
Selphie: Lo Siento mucho... ya no
lo haré más.
Entonces aparece Zell con la
cabeza recién reestructurada.
Zell: Bien supongo que tendremos
que coger el tren que va hacia Dollet para así reunirnos con Quistis y de paso
Selphie podrá fo(censura)se a Irvi... (Selphie hizo amago de coger el hacha)...
esto... ¿marchamos ya?.
Así pues nuestros primeros
protagonistas emprendieron su camino hacia Dollet y ver cumplido así los
designios del destino.
De mientras en un bareto de
Winhill:
Irvine: Sírveme otra
ronda...hics...camarero
Camarero: Creo que deberías beber menos y pagar más...
Irvine: Un respeto insensato...
gracias a mí tu culo no desapareció del
planeta así que sírveme otra ronda
La patada en trasero de Irvine
fue inevitable y este se encuentra en estos momentos en la calle en posición
más que deshonrosa.
Irvine: Vale, vale ahora os
pago...
Irvine intentó pagarles con tazos
del pokemon a ver si colaba...no colo. Las hostias empezaron a caer de todos
los sitios y Irvine no podía hacer nada más que comérselas todas con patatas.
Una vez acabaron con Irvine, este se encontró postrado, malherido en un
callejón de Winhill.
Un interrogante debe aparecer en
las mentes de todos los lectores a estas alturas... ¿Qué se ha hecho de
Irvine?. ¿A que se debe su deplorable situación? Vamos a repasar rápidamente
los acontecimientos que han marcado la vida reciente de Irvine.
Harto de la ingente ninfomanía de
Selphie, Irvine decidió marcharse del Garden para volver a vivir aventuras.
Como vio que de vivir aventuras no se comía decidió buscarse un trabajo y lo
encontró, gracias a Laguna, como pegador de sellos a Lengua en Eshtar Post.
Pero su carrera se vio truncada cuando medió Eshtar fue intoxicado a causa de
su tóxica mucosa salival y fue despedido. Entonces Irvine volvió a verse sumido
en la incertidumbre pero esto duró poco. Se apuntó en un programa de televisión
llamado “Operación Zoquete”(Que resultó ser un Mega-Hit televisivo). El
programa consistía en dos cosas: La primera en hacer ver que cantabas, ya que
seamos sinceros, Irvine cantar lo que se dice cantar nunca llego a hacerlo, más
bien parecía que estaban haciendo una misa negra al ritmo de “a tu lado me siento pitufo, de
tu lado me escurro, de tu lado me voy a apartar”. La segunda cosa consistía en
hacer el zoquete tanto como se pudiera. Como era de esperar Irvine arrasó en la
final(sobretodo en lo de hacer el zoquete)
con más del 90% de los votos. Entonces la diosa fortuna se puso del lado
de Irvine y una empresa Discográfica le hizo un contrato multimillonario y
gracias a su primer single en solitario “Soy una cabra hepática” conquisto en
nº1 en ventas en todos los países. Después de esto Irvine decidió montar un
grupo de “Heavy Metal” que bautizó como “Los supositorios” y emprendió una gira
por todo el mundo pero todo cambió cuando llegaron a Winhill. Y es que a quien
se le ocurre traer un grupo heavy en un
pueblo donde lo más fuerte que han oído es el opening de la abeja Maya. Cuando
el pueblo de winhill empezó a oír frases como “deseo sorber tu cerebro con una
pajita de colores” este se abalanzo hasta el joven grupo decidido a arrancarles
la piel . y de echo así lo hicieron con
los compañeros de grupo de Irvine que pasaron a ser esterillas de recibidor
pero Irvine consiguió sobrevivir gracias a
su LV100 de combate (Un recuerdo del viaje con Squall) no sin antes
cargarse a medio geriátrico y quedar muy malherido. El resto de la historia ya
lo sabéis.
Y en estos momentos, Irvine, en la oscuridad
más basta fruto de los continuos martillazos que el destino le ha aplicado,
recibe la carta con el contenido que ya se ha mencionado anteriormente. Y
entonces Irvine por primera vez en mucho tiempo y sin que sirva de
precedente... ¡¡penso!!... y del esfuerzo le vino un cólico que un poco más lo
hace pasar a mejor vida y mientras agonizaba en la soledad del callejón
consiguió decidir, no sin muchas dificultades que emprendería el viaje hacia
Dollet para encontrarse con sus antiguos compañeros y , quizás, cambiar el rumbo de su desdichada vida (En
realidad el principal motivo que le impulsaba a hacer este viaje era la
posibilidad de servirse un buen trago de whisky a cargo de la hospitalidad de
alguno de sus compañeros). Así pues Irvine, con renovadas fuerzas, emprendió el
corto pero tedioso camino hacia la estación de
trenes de Winhill (tedioso sobretodo si te acaban de dar una paliza y su
concentración de sangre en su corriente alcohólica es muy reducido), sin ser
consciente de los problemas que esto le provocaría...
De mientras en un local muy
refinado de Timber, Squall y Rinoa tomaban una copa...
Squall: Esto... Rinoa... creo que
deberíamos ir...¿no te parece fantástico la posibilidad de volver a ver a
nuestros antiguos compañeros de aventura?
Rinoa: (Visiblemente enojada) La única razón que me motiva para ir es la
satisfacción que me produciría el poder pegarles una patada en el trasero tan
descomunal que sus hemorroides les saldrían disparadas por la boca.
Squall: Bueno... ya veo que no
tienes muchas ganas... pero creo que la gente ha de saber perdonar.
Rinoa: Te recuerdo que cuando me
querían matar por lo de bruja en vez de salvarme estaban viendo un capítulo de
“sensación de vivir” por la televisión.
Squall: Ah... si... era un
capitulo muy interesante porque Brandon
decidió declararse... (La bofetada fue inevitable y de tal intensidad que
Squall, en su inexorable camino a través del suelo del bar les pulió todos los
azulejos, cosa por la cual recibió las gracias de los gerentes del bar que se
ahorraron una buena cantidad en pulidoras).
La escena se traslada, como es
lógico, en el Hospital de Timber, donde un equipo de formidables médicos (entre los que se
encontraba algún especialista en puzzles) intenta desesperadamente que el
cuerpo de Squall(Y especialmente su cara) regrese a las 3 dimensiones después
de la terrible paliza que le ha brindado Rinoa y que lo ha dejado con un
aspecto similar al de un cromo. Como era de esperar Squall recuperó su antiguó
aspecto tridimensional y sin aviso previó, sin ni siquiera una muestra de
interés por su estado por parte de Rinoa, esta le dijo:
Rinoa: He decidido que deberíamos
ir a Timber... algo me dice que debemos estar ahí.
Rinoa mintió como una bellaca ya que más exactamente lo
que pasaba es que recordó que Quistis le debía una suma considerable de dinero
y quizás ya era momento de reclamarlo.
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